La ciudadanía desde la escuela : calidad educativa, expectativas y aprendizajes. Estudio de opinión pública para conocer percepciones y expectativas sobre ciudadanía y formación ciudadana de estudiantes, docentes, y familias en Arequipa, Ayacucho, Callao, Iquitos, Lima y Piura
Date
2016Author
Aragón, Jorge
Cruz, Marylia
Belaunde, Carolina de
Eguren, Mariana
González, Natalia
Román, Andrea
Metadata
Show full item recordAbstract
Los padres de familia tienen altas expectativas con relación a lo que la escuela puede ofrecer para el futuro de sus hijos e hijas. La escuela y, en general, el acceso a la educación son vistos como una experiencia que hace posible mejoras sociales y económicas significativas. En esa dirección, la mitad de los padres y madres de familia encuestados responden que sus hijos e hijas van a la escuela para acceder a una educación superior; alrededor de una tercera parte de ellos piensa que la escuela sirve para mejorar sus condiciones de vida; y casi un 20% cree que la escuela es útil para mejorar su condición social. Las altas expectativas de las familias frente al rol que cumple la escuela en la vida de sus hijos e hijas vienen acompañadas de una evaluación de la educación pública en el Perú y de la calidad educativa de sus escuelas que termina siendo mucho más positiva que negativa. En esta línea, algo más de la mitad de padres y madres de familia califica como regular al sistema de educación pública en el Perú y una cuarta parte lo califica como bueno. Con respecto a la calidad de la educación que reciben sus hijos e hijas en las escuelas a las que asisten, la mayoría de familias entrevistadas la evalúan como buena. Cabe destacar que estas evaluaciones son un tema crítico a tener en cuenta porque las altas expectativas alrededor de la educación podrían terminar generando demandas insatisfechas y frustración frente al Estado que tiene la obligación de brindar una educación de calidad para sus ciudadanos. Sin embargo, por el momento, diera la impresión de que este no es el caso. Por su lado, los docentes tienen una evaluación bastante negativa de la educación pública en general, que contrasta con la valoración mucho más positiva que tienen de la calidad de la educación que se brinda en las escuelas en que desempeñan sus funciones. Es muy probable que al evaluar la educación pública en general, los maestros estén ejerciendo una crítica frente al rol que cumple el Estado. Mientras que al referirse a la calidad educativa de sus escuelas, estén evaluando su desempeño; destacando sobre todo sus esfuerzos e iniciativas, “a pesar” de la desidia del Estado. Algo similar podría decirse acerca de las opiniones de los padres y madres de familia: la educación en las escuelas de sus hijos es mejor que la educación pública en general porque ellos de alguna manera intervienen en ella.